Este bello dormitorio con base en blanco, transmite tranquilidad y relax. El color se añade en textiles, accesorios y juguetes, lo cual hace muy fácil ir adaptándolo a las etapas de crecimiento del niño.
Tan sencillo como pintar de blanco las paredes, poner muebles blancos y dar el toque con un banderín de colores, o pompones de papel de seda, cajas con colores a juego y lo que se te ocurra que le de vida al ambiente.
(fuente)







